Autor: Dr. Jorge Rodriguez-Sierra
INTRODUCCIÓN
El orgullo o el presumir es algo que no se es recomendable, incluso Dios dice que seis cosas aborrece y siete abomina su alma y la primera es los ojos altivos (Proverbios 6:16-17) además establece que el orgullo del corazón es pecado (Proverbios 21:4), finalmente aconseja que no seas tú sino otra persona la que hable bien de ti (Proverbios 27:2). Sin embargo en este pasaje del libro de Jeremías las Escrituras establecen que si hay una sola cosa de la cual el hombre puede exaltarse. Lo que parece aun mas sorprendente es que este comentario aparezca inmediatamente después de palabras muy fuertes sobre el juicio venidero que iba a experimentar Juda por la rebelión y la idolatría, este juicio les decía sobre la muerte de niños, jóvenes y adultos (Jeremías 9:21-22), pero al hacer una revisión cuidadosa de lo que nos dice Dios a través del profeta es posible entender el mensaje tan relevante que da a los judíos de ese tiempo sino también para toda persona de cualquier época que acuden a leer este escrito que nos enseña cuales deben ser las prioridades que debemos buscar.
EL ORGULLO INCORRECTO
Jeremías 9:23 RVR60
23 Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas.
“No se alabe” El profeta al empezar a escribir establece que lo que va a comunicar es un mensaje directo de Dios. El comunicado inicia con un “no”, el cual es adverbio de negación, cada una de las tres frases que se vana a dar en seguida están enmarcadas por un no o un ni que es un marcador que niega lo que se va a decir. Al hacer un análisis detallado de esta frase podemos identificar a tres tipos de personas, sus objetivos o prioridades y el motivo para que estas se convirtieran en cuestión de orgullo.
LAS PRIORIDADES
En sí las tres prioridades u objetivos que establecieron estas personas para sus vidas en si no son malas, al contrario son cosas loables, recomendables, no tienen por sí mismas algo que sea malo. Vemos cada una de ellas.
1) Sabiduría: esta palabra nos habla de conocimiento acumulado, obtenido, es una habilidad que requiere esfuerzo, dedicación, inversión de tiempo y de dinero. Una persona sabia tiene prudencia, toma decisiones adecuadas. Dios demanda al hombre a obtener sabiduría e inteligencia (Proverbios 4:7).
2) Valentía: Esta palabra nos habla de fuerza física, de autoridad, de proeza, de poder que da como consecuencia logros y victorias. El salmista nos dice que Dios está vestido de valentía (Salmos 24:8, 65:6), Dios demando de Josue antes de entrar a la tierra prometida que fuera valiente (Josue 1:8) y el segundo libro de Reyes nos habla de la valentía de los reyes de Israel en un sentido positivo (2 Reyes 10:34, 14:28).
3) Riquezas: Abundancia de posesiones materiales y recursos, poseer una gran cantidad de dinero, tener fortuna, persona que ha prosperado. Dios dio grandes riquezas a Salomón (1 Reyes 3:13) y quién es sabio tiene riquezas (Proverbios 3:13,16)
Como podemos ver estas tres cosas son buenas en sí al ver que le son agradables a Dios y que él las demanda y las da al hombre.
LAS PERSONAS
Jeremías 9:23 RVR60
23 Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas.
El hombre que las consiguió son definidas por ellas al ser nombrados e identificados por cada una de estas prioridades. El hombre que obtuvo sabiduría es llamado sabio, el que obtuvo poder es identificado como valiente y quien consiguió posesiones materiales es llamado rico.
1) Sabio es una persona que es caracterizada por tener sabiduría, es quien tiene destreza y habilidades, es inteligente, es considerado un experto.
2) Valiente es una persona que destaca por su fuerza física, relacionado con su capacidad de lucha. Frecuentemente es considerado un héroe.
3) Rico es una persona acaudalada, que posee más que la norma social, tiene recursos considerables a su disposición.
Nuevamente ser reconocido por cada una de estos logros obtenidos es algo en sí admirable, bueno, es el fruto del esfuerzo, es la meta que se obtuvo con la constancia, con la aplicación, con la disciplina.
LOS MOTIVOS QUE DESTRUYEN ESOS LOGROS
Jeremías 9:23 RVR60
23 Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas.
Sin embargo a pesar de que cada objetivo es bueno en si y es algo que incluso Dios demanda u otorga al hombre, hay dos frases claves que destruyen estos logros, los pervierten, les quita su valor y de algo deseado se vuelve en algo que a Dios le desagrada tanto que termina por desacreditarlos y ordenar que no deben de celebrarse.
1) La primera frase que destruye estos logros: “No se alabe”. Alabar es presumir, alardear verbalmente, exaltarse a sí mismo, es ser arrogante, es mostrar orgullo. Cuando el hombre que es bendecido por Dios al recibir sabiduría, valor y riqueza hace que su corazón se hinche de orgullo y empieza a presumir, a decir a los demás lo mucho que tiene de ese logro en particular va a terminar por conseguir con esa actitud altiva que Dios lo aborrezca. El orgullo lleva a negar que todo lo bueno que recibimos es algo que solo obtenemos porque Dios en su gracia nos lo da para que nosotros lo administremos para el beneficio del prójimo y con ello dar gloria a Dios y no a nosotros mismos: “Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación.” (Santiago 1:17). Dios enfáticamente ordena al hombre a no presumir de las bendiciones que recibe.
2) La segunda frase que destruye estos logros: “En su”. “En” es una preposición que nos dice que a lo que se está refiriendo se descansa en ello, que es el fundamento y la razón, marca una posición. “Su” es un pronombre que distingue o denota algo en particular. Esta frase nos habla que esta persona mencionada en este pasaje se alaba o presume en lo que obtuvo y que es algo que le pertenece, es algo que alcanzó y que es de su propiedad. El sabio hizo de la sabiduría algo que lo llenó de orgullo y que le hace desconocer a Dios, le hace sentirse de mayor inteligencia por lo que cree que es superior a los demás, lo mismo le pasa al valiente que le hace soberbio su poder y el rico sus posiciones. La bendición de Dios lo hizo exaltarse a sí mismo y siente que él en sus propios méritos y esfuerzos obtuvo las recompensas de su tenacidad y su esfuerzo; todo habla de él y de nada ni nadie más. Dios es claro al decirnos: “Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo;” ( 1 Pedro 5:6). El hombre no fue creado para alabarse a sí mismo ni a los logros obtenidos, fue llamado a alabar solo a Dios.
Dios nos da regalos y el hombre en su condición caída y depravada los convierte en cosas que al abusar de ellas y usarlas en forma inadecuada termina por quitarles su gran valor, como el sexo, el dinero, la sabiduria, el poder y las posesiones.
EL “ORGULLO” CORRECTO
Jeremías 9:24 RVR60
24 Mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová.
“Mas alábese en esto”. El hombre que ha olvidado de dónde vienen las bendiciones que ha recibido y que ahora por ellas se cree superior a los demás y lo anda presumiendo Dios le da una opción mejor, superior, digna de ser reconocida; por lo que el hombre no debe presumir de su inteligencia, su poder y sus recursos materiales.
“el que se hubiere de alabar”. La actitud de presumir quedó establecido que no es algo que debemos de buscar, es una actitud equivocada pero Dios establece que si el hombre decide presumir no está basado en una serie de logros sino está enfocado en una persona que es Dios.
“ Yo Soy JEHOVÁ”. Es el nombre propio del Dios de Israel, el único Dios, el creador del universo. Significa El que existe, el Eterno. El diccionario de idiomas bíblicos: Hebreo, de Swanson menciona: “Jehová (Dios verdadero) Yahweh: Jehová, el SEÑOR, en la mayoría de las versiones el nombre del único verdadero Dios, con un enfoque en la existencia segura y Su relación con sus personas y pueblos del pacto: “Dijo Moisés a Dios: He aquí que llego yo a los hijos de Israel, y les digo: El Dios de vuestros padres me ha enviado a vosotros. Si ellos me preguntaren: ¿Cuál es su nombre?, ¿qué les responderé? Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo: Así dirás a los hijos de Israel: YO SOY me envió a vosotros. Además dijo Dios a Moisés: Así dirás a los hijos de Israel: Jehová,4 el Dios de vuestros padres, el Dios de Abraham, Dios de Isaac y Dios de Jacob, me ha enviado a vosotros. Este es mi nombre para siempre; con él se me recordará por todos los siglos.” (Éxodo 3:13–15).
"en entender”. Lo importante para el hombre es entender a Dios. La palabra entender nos habla de percibir mentalmente, tener la capacidad de comprender implicando que es el resultado de una enseñanza adecuada y correcta. Es ser instruido en quien es Dios y esa instrucción la encontramos en las Escrituras.
“en conocerme”. En saber quién es el gran Yo Soy, el que está presente. En reconocer que existe, tener la idea de quién es el Creador del Universo, el único y verdadero Dios.
La alternativa al orgullo que sale del corazón malo del hombre que cree que el todo lo puede es humillarse al entender que Dios es el único digno de todo reconocimiento y alabanza. El único orgullo si hay uno para tener es decir: “a Dios sea la honra y la gloria, yo no soy nada, solo soy objeto de su gracia que me da infinitas bendiciones que en mis propios esfuerzos jamás podría lograr ni jamás debería recibir.”
LAS COSAS QUE QUIERE DIOS
Jeremías 9:24 RVR60
24 Mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová.
"que hago” El profeta Jeremías al continuar hace un increíble contraste de los logros humanos con lo que Dios hace, con lo que Dios es en su esencia. Hacer es comportarse de cierta manera, mostrar un determinado comportamiento o atributo, llevar a cabo un acto. Dios le caracteriza su justicia porque es santo (Levítico 19:2) y a partir de este atributo es que podemos entender todos los otros atributos, solo así es posible empezar a comprender que no solo Dios muestra amor sino que él es amor y la magnitud que tiene ese atributo de Dios.
Lo que Dios hace:
1) “Misericordia” Este atributo de Dios manifiesta que no da al hombre lo que merecen sus actos, demostrando con ello una clase de amor que es leal e inagotable. Es un favor que da beneficios en lugar de castigo que detiene en su bondad: “¿Qué Dios como tú, que perdona la maldad, y olvida el pecado del remanente de su heredad? No retuvo para siempre su enojo, porque se deleita en misericordia (amor leal). El volverá a tener misericordia (muestra compasión) de nosotros; sepultará nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar todos nuestros pecados.” (Miqueas 7:18-19).
2) “Juicio” La decisión de tomar una decisión jurídica. Esto nos presenta a Dios como un Juez (Hebreos 12:23) quien dará una sentencia basado en su santidad y quien su nombre no esté inscrito en el libro de la vida será echado en el lago de fuego (Apocalipsis 20:11-15), es por ello que Dios es paciente y quiere que todo hombre proceda al arrepentimiento ya que no quiere que el hombre muera espiritualmente (2 Pedro 3:9).
3) “Justicia” El juicio de Dios será perfecto ya que se va de acuerdo con su santidad, su perfección, la cual implica emitir un juicio en forma perfecta al no tener favoritismo, egoísmo, prejuicio o engaño, que se establece y conforma totalmente a las normas o reglas. Esto nos habla que se apega a la verdad, es justo, éticamente correcto.
“en la tierra” Dios muestra quien es a la humanidad y que no hace distinción de personas o de naciones, así como será un Juez justo para todo el mundo, su misericordia al igual se extiende sin hacer diferencias.
“Porque estas cosas quiero” La palabra quiero indica algo que se desea, es tomar un alto grado de placer y satisfacción en llevar a cabo una serie de acciones, es en lo que se deleita, se complace y es algo que sale de su voluntad. En pocas palabras Dios hace esto porque le agrada porque así es su esencia, Dios afirma en este pasaje que Él es santo, justo y misericordioso.
"dice Jehová” Finalmente se da una declaración enfática y explícita la cual es establecida con autoridad y está firmado por Dios mismo, no es la idea o lo que cree el profeta sino las mismas palabras que Dios comunicó.
ESTABLECIENDO LAS PRIORIDADES CORRECTAS
En este pequeño pasaje podemos ver como buscar cosas que en si son buenas pueden convertirse en el todo del hombre y al conseguirlas lo llenan de orgullo que le hace perder o incluso evitar tener una relación de comunión con Dios.
El respeto a Dios da sabiduría (Proverbios 1:7) y ser sabio ayuda a tomar decisiones correctas que pueden llevar a tener prosperidad y/o poder, en caso de que esto ocurra se requiere de un corazón muy analítico que continuamente se esté revisando si esta en la fe correcta. Lamentablemente el problema es que al llegar a tener estas bendiciones puede hacernos pensar que somos autosuficientes y llevarnos a alejarnos de Dios. El problema no son estos logros sino que estos se conviertan en el todo de la vida del hombre y que se entregue en alma y cuerpo a obtenerlos incluso usando medios incorrectos.
Cristo nos puso en claro cómo debemos de enfrentar la vida al colocar las prioridades correctas: “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.” (Mateo 6:33). La prioridad de cada hombre debe ser buscar a Dios, por ello dice que si de algo debemos presumir es de saber quien es El, de entender lo que demanda, conocer sus características y cuando entendemos sus atributos es entonces que podemos ver el extraordinario amor que nos da al perdonar nuestros pecados cuando nos arrepentimos y darnos la vida eterna, por ello es que en gratitud debemos sometemos a sus mandatos y al reconocer en Dios su gracia confiamos que todo lo que necesitamos Él nos lo va a proveer porque conoce nuestras necesidades, por ello buscar lo material no debe ser la prioridad del hombre. Esto lo entendió a la perfección Jeremías al escribir en su libro de Lamentaciones: “Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad. Mi porción es Jehová, dijo mi alma; por tanto, en él esperaré. Bueno es Jehová a los que en él esperan, al alma que le busca.” (Lamentaciones 3:22-15).
Dios quiere una relación contigo de Padre a hijo, esta en ti tomar las prioridades correctas que te llevaran a la eternidad; es un asunto del corazón y una decisión personal dar prioridad a conocer y entender quién es Dios y cuando lo haga se que no podrá hacer otra cosa que convertirse y va a servirle por amor.
Te invito a que contestes con honestidad a esta pregunta: ¿Y cuál es tu prioridad?
Te invito a que te comunicas conmigo con tus preguntas y tus comentarios a: esclabiblia@gmail.com
Exportado de Software Bíblico Logos, 22:01 20 de septiembre de 2021.
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