Autor: Dr. Jorge E. Rodríguez Sierra
INTRODUCCION
El festejo más importante de los hombres es recordar su nacimiento. Se realizan gastos muy importantes, se invitan personas, es un tiempo de alegría. La fecha que mejor recordamos y la que más se nos pregunta es precisamente cuando nacimos. Pero la fecha del nacimiento de la persona más importante de este mundo es desconocido. Hay cuatro Evangelios y en algunos de ellos se nos dan datos muy específicos del nacimiento de Jesús. Mateo se centra más en la actitud de José y el viaje de los magos de oriente. Marcos omite totalmente alguna referencia sobre el tema. Juan solo refiere que la segunda persona de la Trinidad nació y habito en este mundo. Es Lucas el que después de hacer una investigación con mucho cuidado (Lucas 1:3-4) nos da la mayor información de este evento que vino a transformar y dividir la historia del mundo.
UNA FECHA IMPRECISA
"Aconteció en aquellos días, que se promulgó un edicto de parte de Augusto César, que todo el mundo fuese empadronado. Este primer censo se hizo siendo Cirenio gobernador de Siria."
A pesar de que Lucas nos da datos sobre el tiempo en que Jesús nació es imposible poder precisar una fecha exacta. El tiempo que menciona es amplio. No hay un año especifico y mucho menos un mes o un día. Solo establece una época donde Augusto Cesar dio la orden de que los territorios y naciones que Roma dominaba se registraran. Esta orden fue alrededor del año 8 antes de Cristo y se piensa que esta orden no se llevó a cabo hasta dos años después en Israel, poniendo el nacimiento de Jesús alrededor del año 6 o 4 antes de Cristo, no en el marcado en el calendario actual ya que esto fue un error cometido por quien se le dio el encargo de establecer la fecha siglos después. ¿Pero qué razón hay para Dios no haya dado una fecha específica del nacimiento de su Hijo en los Evangelios? Es interesante notar que las únicas personas que son mencionadas en la Biblia festejando su nacimiento son Faraón (Génesis 40:20) y Herodes (Mateo 14:6) y estos no son judíos. Si la fecha fuera importante Dios la hubiera dado, le hubiera dado la información a Lucas que fue muy detallista al escribir el Evangelio (Lucas 3:1-2). Dos mil años después podemos ver la razón, la gente celebra la fecha y ha olvidado a quien nació y la razón por la que Jesús vino a este mundo. Se festeja al niño pero se olvida al Salvador.
UN EDICTO PRECISO
"E iban todos para ser empadronados, cada uno a su ciudad. Y José subió de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, que se llama Belén, por cuanto era de la casa y familia de David; para ser empadronado con María su mujer, desposada con él, la cual estaba encinta. Y aconteció que estando ellos allí, se cumplieron los días de su alumbramiento."
Jose vivía en Nazaret y el edicto romano lo obligo a salir de su ciudad para desplazarse a la ciudad de Belén ya que era descendiente del Rey David. ¿Qué fue lo que llevo a que se diera este edicto? A simple vista parece que el emperador romano lo hizo para beneficios de su imperio pero en realidad solo estaba siendo dirigido por Dios para que a través de esta orden José y María fueran a Belén con la finalidad de que Jesús naciera en esa ciudad como el profeta Miqueas (Miqueas 5:2) lo había profetizado 735 años antes. Póngase en los zapatos de José y María, una pareja joven, experimentando por primera vez la responsabilidad de un bebe en camino, con la carga emocional de lo que la gente que los conocía pensaban y decían a sus espaldas por este embarazo que inicio antes de su boda, además los dos sabían a la perfección que este bebe que esperaba María era el Mesías prometido de Dios y por si todo esto fuera poco, justo cuando las fechas se acercaban para el nacimiento del bebe ahora se veían obligados por un gobierno extranjero a realizar un viaje largo a otra ciudad dejando la comodidad de su casa y ciudad.
Efectivamente todo parecía estar en su contra, nada era fácil. Pero detrás de todas estas dificultades humanas, Dios estaba con ellos. Y nuestra vida no es diferente, a veces tenemos que enfrentar eventos difíciles que nos pueden parecer ilógicos o injustos pero cada uno de ellos tiene un propósito específico y aunque no lo entendamos el día de hoy, Dios los estableció por una razón y quizás sea mucho tiempo después o incluso hasta en la eternidad que podamos ver la razón de lo que tuvimos que vivir. La Biblia no nos dice que fue lo que pensaron José y María pero si ellos conocían la Palabra de Dios estarían convencidos de que era Dios quien los guiaba a esa ciudad para cumplir la profecía. Nosotros no tenemos pasajes específicos que nos digan en forma clara que decisiones tomar para cada área de nuestra vida, pero al leer la Biblia ella nos aconsejara, nos guiara, nos dará fuerza y confianza cuando tengamos que enfrentar estos eventos difíciles en nuestras vidas. Si José y María no la tuvieron fácil y ni Jesús tampoco, entonces no espere que por ser cristiano usted no tendrá problemas o dificultades.
Dios siempre ha estado en control de este mundo, cada acto, evento y suceso que ocurra no es al azar, hay un motivo especifico y detrás de estos Dios será exaltado y glorificado (Daniel 2:21). Quizás el emperador romano pensó que era él quien mandaba el edicto pero en realidad él solo estaba siguiendo la voluntad de Dios.
UNA IDENTIFICACION PRECISA
"Y dio a luz a su hijo primogénito, ..."
La palabra primogénito es de vital importancia que la podamos entender. María fue quien dio a luz a Jesús y este fue su hijo primogénito. La palabra griega usada en este pasaje es prototokos que significa el primero de más personas que le van a seguir, por lo que está sola palabra nos dice que María tuvo más hijos. La página de internet Catholic.net considera a la Biblia de Jerusalén como una Biblia para especialistas y un instrumento indispensable para el estudio científico de las Escrituras por la fidelidad del texto, al leer en esta versión Lucas 2:7 menciona que María dio a luz a su hijo primogénito, la misma palabra que usan todas las demás versiones bíblicas. Es el apóstol Juan que al referirse a Jesús en cinco ocasiones usa una palabra diferente para identificar a Jesús como el hijo de Dios y esta es Unigénito (Juan 1:14, 1:18, 3:16, 3:18 y 1 de Juan 4:9), esta palabra nos dice que Jesús es el único hijo de Dios y Lucas describe a Jesús no como el único hijo de María sino como el primero. En los Evangelios de Mateo, Juan y Lucas nos afirman que Jesús tuvo más hermanos e incluso hermanas (Mateo 12:46-47, 13:55-56, Juan 2:12; 7:3, 5, 10; Hechos 1:14).
Es increíble que la Biblia siendo tan clara, sea ignorada e invalidada por la tradición humana y haga toda una cultura de la adoración a María basada en la creencia que solo fue madre de Jesús y que no tuvo más hijos. La Biblia establece lo contrario y jamás la opinión, tradición o creencia humana puede tener más valor que lo dicho por Dios y lo que establece en forma contundente en su Palabra. Así que cada persona debe de hacerse esta pregunta: ¿quién tiene la razón Dios o la tradición humana? La respuesta debe ser más que obvia. Pedro y los apóstoles les dijeron a los religiosos judíos que era necesario obedecer a Dios antes que a los hombres (Hechos 5:29). Mi intención no es ofender, lo que quiero es invitarlo a que abra la Biblia para que la lea con atención y deje que sea Dios quien le hable en forma directa a través de ella, la decisión es personal.
UN LUGAR PRECISO
" ... y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón."
Suena increíble que el Hijo único de Dios haya nacido en un pesebre. No es difícil concluir que el lugar que existía en Belén para alojar visitantes estaba lleno con toda la gente que había llegado de diversas ciudades para registrarse. También es lógico pensar que el viaje de José y María fue más lento debido a la condición avanzada del embarazo por lo que llegaron más tarde que la mayoría y no encontraron un lugar donde alojarse. Dios pudo haber hecho posible un lugar para ellos en el mesón ya que para Él nada es imposible, pero a través de esta situación Dios nos enseña que lo que el hombre considera como importante para Él no lo es. El nacimiento del único hijo de Dios fue en un lugar donde los animales de los viajeros eran guardados. Jesús nació en un lugar humilde, probablemente ruidoso, de mal olor y no muy limpio. Es sorprendente que el Hijo de Dios naciera en tal lugar pero eso solo resalta el verdadero motivo por el cual vino a este mundo, a morir en sustitución de pecadores y reconciliarlos con Dios.
Los hombres incluso algunos cristianos le dan más valor a la ropa, a los carros, a las joyas, a las casas, en general a lo material pero Dios en este acto de humildad nos enseña a valorar lo espiritual. Pongamos por lo tanto un valor mayor a lo espiritual y a lo que Dios nos presenta en su Palabra.
EL MENSAJE PRECISO DE LA NAVIDAD
No debemos olvidar que la Navidad nos muestra que el amor de Dios se mostró al enviar a su Hijo a nacer en este mundo para que años después fuera a morir en una cruz en sustitución del hombre pecador. Pero de nada sirve tanto festejo si nos olvidamos de Jesús. Hagamos de esta fecha una razón de júbilo y de gratitud por que en el nacimiento, vida, muerte y resurrección de Jesús está el regalo más extraordinario que el hombre puede recibir, el perdón de sus pecados. Así que esta Navidad expresemos a Dios nuestra gratitud por su gracia y misericordia que hace posible la reconciliación con Él y la promesa de una eternidad a su lado.
Le invito a que hoy crea en Jesucristo como su Salvador y Señor al arrepentirse de sus pecados y poner su fe en El. Celebre la Navidad de la mejor manera reconciliandose con Dios a traves de su Hijo Jesucristo.
Te invito a contactarme con tus preguntas y comentarios a: esclabiblia@gmail.com